lunes, 25 de noviembre de 2013

El Swing potente, sin esfuerzo a la vista y magnífico es directamente proporcional a tu condición física.

El Swing potente, sin esfuerzo a la vista y magnífico  es directamente proporcional a tu condición física.
Quisiera comenzar este artículo nombrando que vengo de una familia totalmente adictiva al golf (como suele suceder con este bello deporte), y que juego desde que tengo 7 años.
El golf es un deporte de repetición lo que hace que nuestras articulaciones, ligamentos y músculos estén sometidos a un desgaste si no se cuidan de forma adecuada.
Resulta curioso que a pesar de la tecnología, las mejoras en los equipos de golf y las bolas no ha cambiado mucho la media del hándicap de los jugadores de golf. 
Siempre está el jugador que cambia de maleta cada dos años y se mete en cuanta clase existe y  sigue con el mismo score a pesar del super equipo.
Querido golfista invierte en tu condición física, cuando mejores en ese punto los palos y la alta tecnología solo serán de gran ayuda.
Lo más importante de todo es que desarrolles al máximo la capacidad que tenga TU CUERPO para poder hacer un Swing eficiente, sin olvidar que nuestras articulaciones  tienen una amplitud articular que es distinta en cada persona.  No obligues a un señor de 70 años a tener la misma amplitud (giro) que un chico de 16 pero cuidadito, de pronto te sorprendes que a pesar del descuadrado Swing del Señor, su juego es más derecho, más efectivo y lo disfruta al máximo.

Para poder lograr una puesta en forma es importante la movilidad, la estabilidad, el equilibrio, la consciencia corporal (propiocepción), la fuerza y la potencia.
Potencia: para generarla tenemos que sentir nuestros pies bien conectados al suelo (propiocepción) de allí podremos utilizar las piernas para aumentar la potencia del swing con un mínimo esfuerzo. Nuestro cuerpo se mueve a través de cadenas cinéticas que relacionan a músculos y articulaciones y van trasmitiendo la fuerza hasta su destino final, en este caso el swing.  Si alguna parte de esta cadena no está bien (lesión, debilidad, agotamiento) el organismo va a protegerlo y le daremos mucho más trabajo a otras partes del cuerpo para compensar esta pérdida de energía. (Lumbalgias de repetición, en muchos golfistas por falta de rotación en las caderas y sobrecargan la columna).
Estabilidad: Cuando estemos en nuestro Stand tenemos que sentirnos cómodos, estables para poder realizar los movimientos de forma más libres y que la fuerza pueda fluir sin obstáculos por todas las cadenas musculares.
Movilidad: para tener  mayor amplitud articular es muy importante el estiramiento antes y después de salir al campo.  Si nuestras articulaciones están libres y con el rango de movilidad optimo no tendremos ninguna resistencia para un Swing fluido y más natural.
Fuerza: Tenemos que analizar el Swing para saber que parte de nuestro cuerpo tiene problema, hoy en día médicos y fisioterapeutas especializados en golf pueden ayudarnos a encontrar nuestras debilidades, éstos profesionales darán las pautas correctas para que tu Swing que es único e individual sea el más óptimo y así puedas mejorar cada día tu hándicap.
En próximos artículos iré publicando ejercicios para cada fase del Swing, y como poder lograr la mejor condición física.

Ft. Vanesa Tejero León
Fisioterapeuta
Osteópata
Golfista

Bibliografía:
1.     CRAIG DAVIES; VINCE DISAIA. Anatomía del Golfista. Editorial Tutor.
2.     STEVE NEWELL, Remedios y  ajustes para el swing de golf. Editorial Tutor.